El aislamiento acústico es una cuestión fundamental en un local de hostelería. Debe abordarse en dos ámbitos diferentes: de cara al exterior para evitar ruido a vecinos y negocios próximos y en el interior para permitir las conversaciones entre clientes y lograr una homogeneidad sonora. En el blog de SillasMesas.es hoy te explicamos qué aspectos debes tener en cuenta para determinar qué necesitas para aislar acústicamente tu negocio de hostelería y diferentes opciones disponibles en el mercado.
El ruido: cuestión fundamental en hostelería
El ruido puede llegar a ser un auténtico problema en un establecimiento de restauración. Si no contamos con una insonorización adecuada es probable que las molestias provocadas a las viviendas cercanas, otros locales o la propia calle acaben en denuncia al incumplir la normativa vigente. Lo ideal es que el aislamiento acústico de un bar, pub, cafetería o restaurante se realice en el propio momento de la construcción o reforma del local para evitar obras a posteriori.
¿Para qué aislar acústicamente un local?
El aislamiento acústico de un local de hostelería tiene como objetivo evitar que el ruido que produzca -por la música, sistemas de extracción, cocina, conversaciones…- enturbie el ambiente interior y llegue hasta el exterior provocando molestias por su intensidad. Al mismo tiempo, también impide que entre ruido externo causando malestar entre los clientes. Estas dos cuestiones deben complementarse con una tercera: la acústica interna. ¿En qué debe traducirse esto? En una homogeneidad acústica del local para que no escuche la música sólo el que está al lado de los altavoces y en la menor distorsión posible para poder mantener una conversación sin problema.
La insonorización es un tema básico y un requisito para obtener la licencia de apertura. En los casos de locales en los que habitualmente se pone hilo musical o se organizan conciertos en directo las medidas deben extremarse ya que los niveles de aislamiento acústico varían según el tipo de actividad. Sin embargo, no hay que caer en la falsa creencia que por no tener música no se hace ruido. La cafetera, las máquinas de aire acondicionado, la televisión, la cocina o la propia gente también lo emiten.
Cuestiones a tener en cuenta
Para determinar qué tipo de aislante es el más recomendable y dónde debe aplicarse debe realizarse un estudio de acondicionamiento acústico en el que se tendrá en cuenta:
- Actividad del local y tipo de clientela: si es un bar, por ejemplo, en el que los clientes van habitualmente a ver los partidos de fútbol no es lo mismo que un bar sin televisión ni música.
- Si tiene hilo musical.
- Si organiza actuaciones en directo, especialmente de música.
- Identificar las principales fuentes sonoras.
- Materiales de construcción.
- Dimensiones y distribución interior.
- Tipo de local colindante: es diferente estar al lado de una biblioteca que de un taller de coches.
Elementos acústicos que podemos incorporar
Para aislar acústicamente un establecimiento se pueden implementar medidas en techos, paredes, ventanas, suelos e, incluso, puertas. Una actuación integral siempre será más efectiva.
- Paneles absorbentes: los hay de diferentes materiales, normalmente de lana de roca hidrofugada, fibra de vidrio o textil. Una de sus ventajas es que se adaptan a los diferentes espacios y medidas. Los paneles son recomendables para colocarlos en techos y paredes, tanto en las divisorias interiores como las que den a la calle o edificios colindantes. Otro punto a favor es que se pueden imprimir con ilustraciones o fotografías para integrarlos dentro del estilo decorativo del local.
- Membrana acústica: son unas láminas muy finas que actúan como sustitutas de las planchas de plomo. La flexibilidad es uno de sus puntos a favor, así como la reducción del ruido de impacto al instalarse en superficies duras, como pisos de madera o baldosas.
- Techos: se colocan falsos techos sobre estructuras metálicas con un material aislante en su interior dejando una cámara de aire.
- Cámaras de aire: si las incorporamos entre las paredes funcionarán como un gran aislante que será aún mayor con algún material absorbente como lana de roca.
- Ventanas: el doble acristalamiento también permite que el ruido no salga al exterior y viceversa.
- Puertas acústicas: pueden ser metálicas, de madera, vidrio, de doble hoja… Normalmente se utilizan en estudios de grabación, emisoras de radio, locales de ensayo… pero también se pueden incorporar a tu negocio si su nivel de emisión de ruido será elevado.
La lana de roca o lanas minerales son las más indicadas para locales de conciertos por su gran capacidad para amortiguar y absorber el ruido. Además de su función como aislante acústico también funcionan como un gran aislamiento térmico.
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