¿Quieres cuidar tus muebles de exterior? Descubre cómo proteger madera exterior con estos 4 productos y mantén tus muebles a salvo del clima.
La madera es un material noble sinónimo de calidez, elegancia y naturaleza. Su uso en exteriores en locales de hostelería -en terrazas, jardines, porches, accesos a piscinas- aporta un toque diferenciado. Este tipo de material requiere de una serie de cuidados y tratamientos para evitar que los agentes externos (condiciones climatológicas, humedad o insectos) acaben dañándola. En el blog de SillasMesas hoy te explicamos cómo proteger la madera exterior para mantenerla en buen estado y prevenir que se deteriore.
Agresiones a la madera exterior
La madera utilizada en exterior para elementos estructurales, muebles o suelos sufre una serie de inclemencias muy diferentes a cuando está en interior. Por eso es imprescindible tratarla adecuadamente para conservarla y evitar su deterioro en poco tiempo. Estar a la intemperie supone someterse a:
- Condiciones climatológicas dispares: la lluvia, el viento, el frío y el sol estropean la madera, la decoloran y la dañan.
- Humedad: relacionada con la cuestión anterior. Es el principal enemigo de la madera.
- Hongos: si la madera no transpira y está sometida a una humedad constante acabará cogiendo hongos, los cuales la deterioran de forma irreversible.
- Insectos: para algunos de ellos la presencia de hongos y humedad es el ambiente perfecto para vivir.
Maderas más recomendables para exterior
No todas las maderas tienen el mismo comportamiento en exterior. Entre las más recomendables señalar:
- Madera de Teca
- Madera de Iroko (teca africana)
- Madera de Cumaru (teca brasileña)
- Madera de Ipe
- Madera de cedro
- Castaño
- Roble
Que una madera sea más adecuada para exterior y más resistente que otras no significa que sean inmunes a los agentes exteriores. Por eso siempre es necesario someterlas a unos tratamientos específicos.
Tratamientos para madera de exterior
Lo primero que hay que tener en cuenta es que “exterior” es un concepto muy amplio y genérico. No es lo mismo una terraza con contacto directo al agua que estar fuera pero bajo techo o que sea una zona con altas temperaturas en verano. Por esta razón se definen diferentes clases de uso (de la 3 a la 5 son para exterior). Además, es importante que el tratamiento contemple todas las posibles agresiones que puede sufrir la madera, es decir, que sea hidrófugo, fungicida, insecticida y pigmentado.
Aceite para madera
el de linaza es un producto natural usado tradicionalmente para hidratar y conservar la madera. Al no crear películas permite que la madera siga transpirando, no se dañe, reseque o agriete. Para que sea efectivo hay que aplicar tres o cuatro capas y respetar sus largos tiempos de secado. Por su parte, el aceite de teca es el que produce de forma natural este tipo de madera para protegerla de las inclemencias del tiempo y la humedad.
Además de nutrir permite que la madera siga transpirando, lo que evita que se seque o cuartee. Se aplica directamente sobre la zona o mueble a tratar introduciéndose por los poros de la propia madera. Lo más aconsejable es que al principio se aplique cada tres o cuatro meses e ir espaciando las aplicaciones a medida que la madera ya se impregna de aceite.
Barniz para madera de exterior
antes de aplicarlos es recomendable tratar la madera. Los hay específicos para uso exterior que incluyen protección contra los rayos ultravioleta para que la madera no se decolore. Aún así, su resultado no es tan eficaz como otros sistemas. Se pueden conseguir diferentes acabados: mate, satinado, brillante.
Lasures
también protege la madera pero, a diferencia del barniz, penetra en ella y deja el poro abierto, lo que permite que transpire. Es un tratamiento muy eficaz para la humedad, los cambios bruscos de temperatura y los rayos de sol. Además, sus propiedades biocidas protege de insectos, líquenes u hongos. Existen opciones de lasures con disolvente o al agua.
Pintura para madera de exterior:
funciona como sellado contra el sol y el agua. Uno de sus principales puntos negativos es que no deja percibir la veta natural aunque cuenta con la ventaja de que la amplia gama de colores permite combinarla fácilmente con el resto de mobiliario y decoración. Para que el resultado sea mejor es necesario que la madera esté limpia, seca y lijada.